¿Cómo ahorrar agua en tu jardín? Ahorro Agua
Regar tus plantas de manera más eficiente es posible. De hecho, existen muchos sistemas y accesorios que te permiten ahorrar agua, cuidar el medioambiente y proteger tu jardín al mismo tiempo. Sólo sigue estos sencillos consejos.
Prácticas saludables
Existen prácticas básicas que podemos implementar antes que cualquier aparato o sistema de riego. Como primera medida, es aconsejable regar por la noche o a primera hora del día. De esta forma, evitas las horas de máximo calor, en donde el agua se evapora más rápido y no alcanza a hidratar de manera total tu jardín.
Otra forma inteligente de aprovechar el agua en tu jardín es separar tus plantas por necesidad de hidratación. De esta forma, le darás más agua sólo a las que necesitan más, y no malgastarás regadío en plantas que incluso pueden verse dañadas por exceso de agua.
El césped: una esponja de agua
Dentro del jardín, lo que más agua consume son los metros cuadrados de césped. Para darle máximo rendimiento al agua, debes mantener el césped a 5 o 6 cm de largo máximo. De esta forma, se absorbe de mejor manera la humedad.
Al mismo tiempo, puedes implantar sistemas para recoger aguas lluvias y aprovecharlas para regar el césped.
Mangueras y aspersores
Si bien los aspersores son la alternativa más cómoda para regar jardines, no siempre son las más útiles o ahorrativas. De hecho, jardines pequeños, donde no existen grandes explanadas de césped pueden verse dañados por este tipo de productos.
Lo más recomendable es una manguera, pero sólo para regar de manera superficial el jardín. Dejar una manguera corriendo puede gastar hasta 200 litros de agua en sólo una hora. Para ahorrar en este sentido, utiliza boquillas especiales para tu manguera que dispersen o vaporicen el agua. Así, lograrás aprovechar al máximo este recurso.
Prefiere especies autóctonas. Están acostumbradas a la humedad del lugar y casi no necesitan riego.
Aprovecha la humedad natural del ambiente en tus plantas. Cubre tus maceteros con tela de hilo durante la noche para capturar el rocío matutino.
Establece un horario de días y horas específicas para regar. Las plantas y el ambiente se acostumbrarán a ese ciclo de hidratación y podrás ordenar tu gasto de agua en regadío.